Desde que mi hijo era muy pequeño, cuando salía de viaje me llevaba un par de libros para “continuar” con su enseñanza. Conforme fue creciendo fui añadiendo uno o dos más a la cantidad de libros con los que viajaba, hasta que llegó el día que tuve que reconocer lo que no quería…
Llevaba los libros a pasear
Literal… cargaba con más peso y la verdad es que del tiempo que estaríamos fuera los usábamos cuando mucho dos veces, y eso forzando un poco el tiempo y batallando con las distracciones.
Debo aclarar que mis viajes la mayoría de las veces son algo largos y suelo salir una semana antes de las vacaciones y regresar una semana después, o en temporadas que no son vacacionales. Una vez necesité hacer un viaje e íbamos a permanecer en ese lugar un tiempo largo, prácticamente no eran vacaciones sino una situación familiar, así que con mayor razón creía que debía llevar todo mi material para que mi hijo continuara aprendiendo y realmente ME LO LLEVÉ TODO.
Gran error… Si bien en esa ocasión traté de ser muy intencional con las actividades de mi hijo, me fue imposible hacerlo tal cual como solemos hacer en casa, de hecho casi todos los días solo podíamos hacer una o dos actividades, y estas bastante accidentadas porque llegaba familia, nos hablaban, etc.
Así que llegó el día que me detuve y me dije a mí misma: ¿Qué estas haciendo? ¿Llevas el material de vacaciones?
Los libros pesan, ocupan un espacio y se maltratan cuando los traemos de aquí para allá, así que mi consejo del día de hoy es: Si vas a salir de vacaciones o vas a a estar fuera de casa una temporada OLVÍDATE de los libros, tal ves si hay algo en lo que están batallando sólo llévate ese material o ese libro, pero no tiene caso llevarlo todo, cuando educamos en casa tenemos la ventaja de que no tenemos que ir al tiempo del calendario escolar secular, si por alguna razón te atrasas un mes, puedes ponerte al día al siguiente y créeme, las vacaciones y la desconexión mental hacen mucho bien tanto a la mamá como a los hijos, y cuando regresen verán con ánimos nuevos todo.
Espero este consejo les sea útil… o tal vez yo haya sido la única mamá que llevaba libros a pasear 🤣.